LA
VENGANZA DE LOS TRUJILLOS
Una
de las particularidades de la mentalidad gansteril es la obsesión
irreflexiva por cobrar venganza, preferiblemente con creces, por
cualquier acto, palabra o actitud adversa al propio
capo,
a un miembro de su familia o de su clan, sin
importar que ese
acto u ofensa del condenado
a morir
pudiese
estar
plenamente justificado o no.
Por
ser la encarnación
más acabada del gansterismo, Trujillo no
descansaba hasta consumar plenamente la debida
venganza, con especial saña contra aquellos subalternos o
colaboradores que
él consideraba que le habían sido desleales y que lo habían
traicionado. Y si fuera necesario eliminar a inocentes
para llevar a feliz término la vendetta, también se les eliminaba
sin titubeo de ningún tipo.
Desde
que subió al poder, Trujillo se
aseguraba de
que sus hombres se encargaran de castigar
a todo aquel que se resistiera a sus desmanes y caprichos, a los
colaboradores que trataban
de desprenderse
o que se atrevían a criticar o a conjurar contra su régimen,
haciéndoles pagar la máxima pena como
destino inexorable.
Incontables fueron las víctimas de la ira personal de Trujillo por
atreverse a criticarlo o a resistirse
a
su poder, desde las personas más insignificantes hasta intelectuales
y jefes de estado. Entre éstas, las más conocidas en
el exterior fueron
José Almoina, Jesús de Galíndez, Pipí Hernández, Mauricio Báez,
Andrés Requena, Castillo Armas, Dr.
Tancredo
Martínez y muchos otros que tampoco pudieron escapar al largo brazo
de Trujillo, para no hablar de los numerosos complots
y atentados
fallidos (ver CRIMENES
III
de este portal) contra personas tales como Rómulo
Betancourt, José
Figueres,
los dos
hermanos
Castro, Prío
Socarrás, William
Morgan, etc.
En el caso de Galíndez, unas 7 u 8 personas fueron fríamente
eliminadas como secuela de su secuestro y eliminación. En
cuanto a las víctimas de sus
tentáculos
vengativos
dentro
del
país, éstas son incontables como todos sabemos.
Horas
y días después del ajusticiamiento de Trujillo, es
conocido
el terror que se desató en el país bajo
las órdenes
personales de Ramfis,
persiguiendo a sospechosos, familiares, amigos, choferes, subalternos
y empleados de los conjurados. Se ha identificado un total de 70
personas que fueron asesinadas y dos se suicidaron a consecuencia de
la orgía vengativa de la familia Trujillo encabezada por Ramfis (ver
CRÍMENES
IV
de
este portal).
Se sabe que hubo otros
eliminados
entre
los subalternos y empleados de los conjurados, pero por falta de
detalles no se han inclluido
en las listas.
El úlltimo acto de Ramfis Trujillo antes de zarpar en el yate con
el
cadáver del tirano en
noviembre de 1961 fue
ejecutar borracho en la Hacienda María a seis de los conjurados ya
malnutridos y torturados.
Después
de abandonar la isla hacia Europa donde les esperaba una fortuna de
cientos de millones de dólares en los bancos europeos (una de las
más grandes del mundo, en dólares actuales, miles de millones),
Ramfis Trujillo, su madre y sus hermanos continuaron tramando para
consumar la venganza total por la muerte de su patriarca con el fin
de que no se les escapara un solo conjurado.
El
taquígrafo
y traductor de Ramfis Trujillo, César A. Saillant, en sus memorias
(Revelaciones
a Sánchez Cabral,
1962) nos describe la actitud de Ramfis en París poco después de
salir al exilio. Citamos a Saillant:
“Al
día siguiente, en la mañana, fui a verle para tratarle el asunto de
los cuadreros. Estaba más calmado y se notaba que ansiaba las
confidencias. La aparición de Imbert y de Amiama lo torturaba.
—Yo
siempre pensé —me confesó—
que esos asesinos estaban muertos. Yo apreté mucho a Pupo* [Román
Fernández] a ver si me decía la verdad pues estaba seguro
de que él había hecho matar a Amiama para que no lo comprometiera.
De Imbert no estuve nunca muy seguro; pensé que se había suicidado,
porque si caía en mis manos él sabía lo que le esperaba. Es más,
Saillant, yo te aseguro a ti que esa gente no va a vivir mucho.
Quizás yo no vaya seguido a la República, pero de que caen en mis
manos caen en mis manos.*
La
idea de la venganza lo obsesionaba. Otro día me dijo:
—Tú
puedes estar en la completa seguridad de que si yo hubiera sabido que
esos dos asesinos estaban vivos, a mí no hay quien me haga salir del
país. Con sanciones o sin sanciones, yo me hubiera mantenido en el
poder hasta capturarlos. Pero voy a darle un poco de tiempo al
tiempo. ¿Tú te acuerdas de lo que decían los americanos de papá
cuando la muerte de Galíndez, que papá tenía un “long arm”? Yo
he heredado eso de papá y se metan donde se metan, ahí les
alcanzará mi venganza. No me importa gastar lo que gaste. Y si yo
muero, la gente de Radhamés* lo hace. Y si Radhamés fracasa, la
gente de mamá los mata; pero esa gente no puede estar viva. Es más,
mis hijos no recibirán herencia si esa gente está viva cuando yo
muera: su herencia la recibirán cuando los hayan matado.”
[Fin
de la cita. En diferentes conversaciones con Saillant en diversos días,
Ramfis expresó con
odio la
misma idea fija
de
que sin
duda
Imbert Barreras y Amiama Tio serían
eliminados.]
Por
otro lado,
la revista ¡Ahora!,
en su edición del 15 de marzo de 1963 (pág. 6), publicó un
artículo titulado Ramfis
ofrece US$25,000 por la muerte de dos funcionarios.
Esta noticia también se publicó en otros medios internacionales.
Las víctimas intencionadas eran Venancio Alzaga y Miguel Ángel
Bissié, dos funcionarios españoles de la embajada dominicana en
Madrid que habían estado vinculados al complot para matar a
Trujillo. La policía técnica española había descubierto la trama
y los dos funcionarios quedaron bajo estrictas medidas de seguridad.
Hoy, la suma de US$25,000 equivale a más de US$200,000 dólares.
Dado
que aún después del ajusticiamiento y de salir al exilio los
Trujillos todavía continuaban convencidos de que el Estado
dominicano era herencia de la familia, no aceptaban la idea de que un
anti trujillista como Juan Bosch se atreviera a ocupar el trono
ejecutivo y esto motivó el plan macabro de asesinar al Presidente
electo Bosch antes de que asumiera el mando presidencial. Para lograr
esto les habían enviado una cuantiosa suma a oficiales militares de
los temibles Tonton Macoutes de Duvalier en Haití. Esta trama la
revela un documento desclasificado de la CIA escrito el 23 de febrero
de 1963 (ver documento al final de este artículo).
1966:
Documentos
de la CIA y un artículo del periodista Germán Marte en el periódico
Hoy.com.do titulado Radhamés
Trujillo propuso a Duvalier tumbar a Balaguer
(29 de junio, 2007), dan cuenta de la trama urdida por Radhamés en
la que le ofrecía dinero a Duvalier para tumbar a Balaguer, el
recién instalado
ocupante del trono que los hijos de Trujillo consideraban
exclusivamente suyo. Ver documento de la CIA y artículo de
hoy.com.do al final de este relato.
Este
plan obsesivo de los dos hermanos Trujillo de regresar para retomar
el poder a la fuerza, limpiar
todo residuo de resistencia
y continuar la dictadura totalitaria se transparenta claramente en
varias conversaciones entre Ramfis Trujillo y su taquígrafo, César
Saillant, en los primeros meses de exilio en París (ver Revelaciones
a Sánchez Cabral).
Citamos a Ramfis Trujillo:
Tú
verás ahora lo que es “desyerbar” cabezas y voy a comenzar por
las Fuerzas Armadas.
***
—Lo
único que lamento
—continuó— es
que Rhadamés se haya tirado por su lado, porque tú sabes que él
tiene tanto dinero como yo. En fin, si él llega primero [a
RD],
allá nos daremos las manos.
***
—Aunque
ahora mismo yo muriera, Saillant, el destino de Imbert y de Amiama
está escrito, porque o los mata Rhadamés, o los mata mamá. No
pueden salvarse. Y óyelo bien, para que tú veas que no me equivoco:
estoy seguro de que si nosotros no llegamos pronto a la República,
Luis Amiama va a matar a Antonio Imbert, o Antonio Imbert va a matar
a Luis Amiama, y al que quede vivo de los dos lo van a matar los
mismos que lo rodean. Eso es seguro. Lo único que yo espero es tener
yo la satisfacción de matarlos; no Rhadamés, ni mamá, sino yo. Es
un juramento irrevocable.
***
Tú
leíste aquella vez el plan. Yo te dije que lo había desaprobado,
pero después volví a leerlo y lo encontré bueno. Lo único que
había que agregar era que el punto de partida sería la muerte de
Imbert y Amiama y los nombres de las personas que serían
secuestradas. Te aseguro que después de todo yo preferí que se
fracasara todo, porque Imbert y Amiama son míos y ese es un placer
que no le cedo a nadie.
***
—No,
Saillant, es un error tuyo. Al pueblo no se le puede hacer caso; al
pueblo hay que apretarlo, y mientras más, mejor. Desgraciadamente
hay que reconocer que es así. Tú verás, como te dije anoche, lo
que es mandar con el puño.
Y
agitó frente a mí su puño cerrado.
—Santo
Domingo
—continuó— es
un pueblo que hay que acabar de castrarlo. Papá comenzó; yo
terminaré. Sin ningún oficial de las Fuerzas Armadas se ha
apoderado del gobierno es porque no tienen capacidad; ahí lo que hay
es una partida de patanes, y tú lo sabes. Lo único bueno que había
eran Tontín y Luis José, en la Aviación...
(fin
de las citas de Revelaciones
a Sánchez Cabral
de César Saillant)
Esas
no fueron
palabras vanas. El
día martes, 21 de marzo de 1967, Antonio Imbert Barrera sufrió un
atentado en la calle Pedro Henríquez Ureña, en la zona del antiguo
zoológico
de la capital. Su vehículo fue impactado por una fuerte
ráfaga
de ametralladora con lo cual tanto
Imbert
Barreras como
su chofer quedaron
gravemente
heridos
.
Ya
que el chofer no podía, Imbert
logró
conducir su auto hasta la Clínica Internacional donde recibió
atención de emergencia y ambos
quedaron
hospitalizados.
Diversas versiones señalaban el dedo hacia una alianza secreta entre
elementos balagueristas y trujillistas como los conjurados en este
atentado y Balaguer, para despejar dudas sobre la posible
participación de su gobierno en esa
trama,
nombró como Secretario del Interior y Policía al
otro conjurado sobreviviente, Luis
Amiama Tio, para que encabezara las investigaciones del caso. Sin
embargo, poco después Amiama Tio abandonó el cargo debido a las
críticas sobre la manera en que estaba manejando la investigación,
lo que no debe sorprendernos
dado que Amiama no era ningún
experto en investigaciones criminales. Nunca fueron identificados
los autores materiales del atentado ni a los autores intelectuales
que estaban detrás de
este crímen.
Décadas después, nos señala el historiador Alejandro Paulino
Ramos, los organismos de inteligencia de Estados Unidos “dieron
algunas informaciones del intento de asesinato contra el héroe
nacional que apuntaban hacia los relacionados con Ramfis Trujillo, y
algunos historiadores y periodistas han señalados nombres y sectores
que, a decir de ellos, tuvieron conocimiento sobre aquella acción de
los trujillistas.” (ver Atentado
contra Imbert Barrera en 1967…,
artículo en Acento.com.do del historiador A. Paulino Ramos, fecha: 4
de julio de 2016. Ver
también artículo en Listín Diario: CIA: atentado contra Imbert fue
secuela muerte de Trujillo,
https://www.listindiario.com/la-republica/2007/06/28/18429/cia-atentado-contra-imbert-fue-secuela-muerte-trujillo.
Esta
no es la primera vez que los agentes trujillistas agreden a la familia
Imbert Barreras. Los
lectores recordarán que al día siguiente del ajusticiamiento de
Trujillo en
mayo de 1961, el
hermano de Antonio Imbert, Segundo Imbert Barreras, fue ejecutado en
la cárcel de Puerto Plata donde cumplía una condena por órdenes
del propio Trujillo. Pero
una
desgracia mucho
mayor volvería
a lacerar
la vida de Antonio
Imbert Barreras:
el
15
de febrero de 1970 cayó en las costas de Punta Caucedo un DC-9 de la
Compañía
Dominicana de Aviación (CDA) en que viajaban la esposa Guarina,
la
hija
Leslie
y la
hermana
Aida
de
Antonio Imbert Barrera. Todos los 102 pasajeros perecieron. Las tres
mujeres iban a Miami, en un anunciado viaje, para comprar el ajuar de
novia para la boda de la hija de Imbert. Las causas de este accidente
nunca quedaron
esclarecidas. La nave cayó en el mar casi
inmediatamente
después de levantar
vuelo puesto que tan
pronto despegó el avión, el motor derecho empezó a echar chispas y
prendió fuego. Se considera que la situación se vio empeorada por
el error del piloto de virar la nave en dirección al motor que
fallaba y
no en dirección contraria como
se debe. Los
resultados preliminares, no
confirmados,
indicaron
que el “accidente” del aparato se debió a que el combustible
estaba contaminado con agua. Esto lógicamente
indujo
a pensar en
que
hubo mano criminal dado que agua
mezclada en el combustible inevitablemente causaría la falla del
motor y porque es
imposible que se introduzca agua en el tanque accidentalmente estando
el avión estacionado. La presencia de agua en el combustible sólo
ocurre cuando la nave desciende a
gran velocidad
del
frío extremo
en
grandes alturas hasta
las zonas calientes tropicales;
es entonces cuando puede aparecer condensación
en el tanque del combustible. La pureza del combustible es tan importante, que parte de la revisión estándar requerida antes de que una nave alce vuelo es la revisión del tanque y el combustible. Además,
el
DC-9 ha sido uno de los aviones de pasajeros más seguros en la
historia de la aviación civil y
de más larga vida,
según los récords de accidentes y de performance, lo que reduce
significativamente la posibilidad de una falla mecánica (It is hardly a surprise that the DC-9 is one of the most successful jet airliners. With over 2,400 DC-9s built between 1965 and 1982, Douglas has given the DC-9 family a strong reputation for being reliable and efficient. The DC-9 is also one of the longest lasting aircraft in aviation history with several still in operation today. - Aircraft History of the DC-9). Nos señala
el articulista
del periódico El
Nacional,
quien investigó este accidente en los récords de la aviación
dominicana,
que “lo poco que se tiene de la investigación que se realizó
indica que con relación al hecho hubo cuatro mecánicos presos en
Nueva York y que se tiene la versión de que el
combustible estaba contaminado con agua”. Como
en
todos
los crímenes
políticos
y accidentes sospechosos
durante los 12 años
de Balaguer, la “investigación”
de
este fatídico
accidente
continuó
tras bambalinas
y se
perdió
en
la usual
bruma
de la impunidad. Las
preguntas sin respuestas sobre
esta
catástrofe
continúan
hasta
nuestros días. (Este caso recibió amplia cobertura por la prensa del país y los lectores podrán encontrar fácilmente en la red muchos artículos y análisis sobre el caso.)
Posiblemente
Imbert Barreras fue un mayor blanco de atentados que
Amiama Tio porque
él estuvo directamente involucrado en el ajusticiamiento del tirano
y, además,
en
su descripción de los hechos, siempre ha sostenido desde
1962
que
fue él quien le dio a Trujillo el último
tiro, el mortal, de frente.
Probablemente
nunca conoceremos todas las cábalas urdidas por los Trujillos en el
exilio por ser este tipo de trama de índole conspirativo y secreto y
por haber transcurrido casi cinco décadas desde los años en que los
hermanos Trujillo conspiraban para vengarse y retomar el poder por
cualquier medio. A
pesar de dichas limitaciones,
ha surgido más evidencia de que nunca abandonaron este imperioso
propósito:
En
el juicio que se llevó a cabo en 1973 en una corte distrital de
Nueva York, en el que Angelita Trujillo de Domínguez acusaba al
agente Joseph Frank y a varios abogados de estafa en 1968 por US$1
millón de dólares (hoy unos US$7.15 millones), Joseph Frank (ex
agente de la CIA y de Trujillo) y otro declarante expresaron que
parte del US$1.14 millón de dólares que Angelita le transfirió a
Frank había sido para comprar el silencio (pay off) de la CIA porque
ella (Angelita) había estado involucrada en actividades para matar a
uno de los asesinos de su padre (“they explained that the
difference had been used to pay off the C.I.A. because she had been
involved in activities to kill one of her father's assassins.” - cita de la transcripcion del juicio). La prensa que cubría este caso señaló que antes de participar en esta
transacción para adquirir tierras en Canadá, Joseph Frank había
sido el abogado que hizo las gestiones ante migración para legalizar
la residencia de Angelita Trujillo en Estados Unidos cuando ella
ingresó a ese país en 1967, para lo cual ella no podía tener
manchas en sus antecedentes.
En
dicha transcripción del juicio se aprecia que cuando a Angelita Trujillo le
tocaba rendir declaraciones en relación al tema del complot para
asesinar a uno de los conjurados y la paga a la CIA, Angelita no
quería que la interrogaran directamente sino através de un
intérprete. Los abogados de Joseph Frank se quejaron señalando que
ella, Angelita, no había tenido problemas con el idioma ni necesitó
traductor cuando le tocó ser interrogada sobre otros temas durante
el proceso, pero que por alguna razón, en relación a este tema de
repente sí tenía problemas con el idioma. Naturalmente, al usar a
un traductor, esto le daría más tiempo a ella para calcular sus
respuestas durante el interrogatorio. Ver
la transcripción de este caso en el portal sobre derecho americano JUSTIA, un compendio online de casos legales: https://law.justia.com/cases/federal/appellate-courts/F2/494/145/112551/
En su perseverante interés en retomar el poder, en
1969, los Trujillos organizaban un partido político para el retorno
de Ramfis Trujillo a RD con el fin de participar en la política ya fuera con propósitos transparentes o siniestros. Citamos a la revista Ahora! (pag. 8):
“En
lo que no cabe duda es el objetivo real (no importa que el comienzo
se encubra o no se encubra) del movimiento sería la rehabilitación
política de la familia Trujillo y la vuelta de ellos al poder
enarbolando a Ramfis como cabecilla de la empresa. Todo esto fue
expuesto por la propia Angelita Trujillo en una reunión efectuada
recientemente en la ciudad de Nueva York...” (ver más en la pág.
8 de dicha revista). De
hecho, señala la revista, dos de las personas más entusiastas y
activas en este proyecto eran Angelita y su segundo marido, el
coronel José Luis Domínguez Taveras.
Este acelerado plan se vio truncado por la
repentina muerte de Ramfis en noviembre de 1969 a raíz de
un accidente automovilístico.
(Ver,
entre otros, artículo La
resurrección de los Trujillos en
la r
evista
¡Ahora!
(No. 293) del
23
de junio de 1969, págs.
8 y 73.
Posteriormente,
en 1975 Radhamés se unió a un
partido político de
viejos amigos,
el Movimiento Nacional Progresista (MNP), con el propósito de
participar en las elecciones presidenciales de 1978. Sin embargo,
fuertes divisiones dentro de la incipiente organización política en
que Radhamés fue acusado por un sector de querer monopolizar la
organización para ponerla exclusivamente al servicio de sus
ambiciones,
además
del reducido apoyo popular
que
recibió esa propuesta política, hicieron que Radhamés abandonara
el proyecto. Varios
periódicos de la prensa internacional también informaron sobre este
proyecto. Entre otros, pueden referirse al artículo Trujillo
Still Thinks of Making Comeback,
publicado en The
Day
(New London, Conn), el 25
de febrero de 1974,
pág.
4.
También pueden
referirse al extenso artículo Crónicas
de los 12 años:
El afán de la familia Trujillo por retornar al poder
del historiador Alejandro Paulino Ramos, publicado en el
periódico
digital
ACENTO
el 25 de noviembre, 2016.
FIN
El 31 de mayo, al día siguiente del ajusticiamiento, Radhamés ametralla a presos políticos en la base de San Isidro en represalia por el asesinato de Trujillo.
*****************************************************************************************************
EXTRACTO
Trujillo
mataba por desplantes y desdenes
Tony
Raful
Listin
Diario
16
de enero, 2018
Todo
este preludio es para decir que en su libro, Espaillat asegura que
Trujillo lo envió a Cuba en el año 1955 a participar en las
ceremonias de inauguración de un nuevo período del dictador
Fulgencio Batista, para proponerle una alianza informal entre los dos
gobiernos. La idea, relata Espaillat, de Trujillo, era formar
un frente unido para neutralizar a los liberales de Washington y a
los revolucionarios del Caribe. Espaillat, al ver a Batista y
proponerle el pacto, no lo notó entusiasmado, y Batista le dijo que
estaba dispuesto a darle la bienvenida a cualquier asistencia secreta
que Trujillo pudiese prestarle, pero, “por el amor de Dios, que
nadie lo supiera”. Cuando Espaillat se lo dijo a Trujillo, éste
reaccionó: “Qué sargento de mierda, voy a tumbar a ese bastardo”.
Y
dice Espaillat que inmediatamente Trujillo planeó la operación
denominada “pañuelos y tomates”. La palabra pañuelo
significaba armas y la palabra tomates significaba explosivos.
Trujillo no aceptaba ese tipo de desplantes, incluso hizo contacto
con militares disgustados del ejército cubano para conspirar contra
Batista. Exactamente lo mismo ocurriría luego, el 26 de julio
de 1957, ordenando el asesinato del presidente Castillo Armas.
Ese era Trujillo, no se le podía herir, ni despreciar, ni sentirse
avergonzado de él, no perdonaba la ingratitud. A Batista no lo pudo
matar como a Castillo Armas, pero cuando Batista vino huyendo de Cuba
a raíz del triunfo de Fidel Castro, lo humilló, lo pateó, lo metió
preso y luego lo dejó salir del país.
[Fin del extracto]
**********************************************************************************************************************************
Mandan a asesinar a secretario de la embajada dominicana en Costa Rica sencillamente por ser uno de sus primos uno de los expedicionarios hechos prisioneros en la gesta de 1959.
RADHAMÉS
TRUJILLO PROPUSO A DUVALIER TUMBAR A BALAGUER
Hoy.com.do
29 de julio, 2007
SANTO
DOMINGO.- El hijo menor del tirano Rafael Trujillo Molina, Radhamés
Trujillo, ofreció en 1966 ayuda financiera al dictador haitiano
François Duvalier a cambio de que este colaborara para derrocar al
entonces recién instalado Presidente Joaquín Balaguer, revela uno
de los documentos desclasificados antier por la CIA.
En
un reporte fechado el 13 de julio de 1966, la CIA informa que
Duvalier desestimó la propuesta de Radamés tras considerar que
afectaría negativamente sus buenas relaciones con Balaguer.
Duvalier,
dice el informe, descartó volver a conversar con Trujillo porque
esperaba ver los beneficios económicos de su relación con Balaguer.
Empero, no descartaba colaborar luego con Trujillo si el gobernante
dominicano se tornaba hostil.
En
el segundo párrafo del documento de dos páginas, la CIA dice que
Duvalier recibió de Balaguer una propuesta para enviar a República
Dominicana 45 mil cortadores de caña haitianos para la corporación
azucarera dominicana.
A
cambio Duvalier recibiría en su cuenta personal US$20 por cada
bracero haitiano, es decir un total de US$900 mil. Entre las
condiciones del trato se le requería a Duvalier que garantizara el
retorno de los haitianos a Haití.
De
acuerdo con el historiador Bernardo Vega, la noticia no es nueva, y
señaló que cuando el Fondo Monetario Internacional chequeó las
finanzas del Banco de Haití encontró evidencia de los depósitos
hechos por la corporación azucarera dominicana a favor de la cuenta
personal del gobernante haitiano.
Vega
precisó que como encargado del transporte de los haitianos hacia
territorio dominicano Balaguer nombró “nada más y nada menos que
al chofer de Trujillo la noche del 30 de mayo de 1961, Zacarías de
la Cruz”.
En
los camiones donde eran trasladados los braceros haitianos también
venían “Tontón macoutes” (la temible banda paramilitar de
Duvalier) para garantizar que se “portaran bien” y no conspiraran
desde aquí para derrocar la tiranía duvalierista.
Los
“tontón macoutes” colaborarían además para que los braceros
haitianos regresaran a su país.
El
ex embajador dominicano en Washington recordó que para la época las
relaciones de Balaguer con el dictador haitiano que prohibió que en
los cines dominicanos se exhibiera la película “Los comediantes”,
un film extremadamente crítico contra la dictadura duvalierista.
Contra
Juan Bosch
En
otro reporte de la CIA fechado el 23 de febrero de 1963 se habla de
que la familia Trujillo había dado mucho dinero al gobierno haitiano
para asesinar al recién electo presidente Juan Bosch.
“Eso
fue un simple rumor, no tenía base”, expresó Vega.
Empero,
ese incidente podría haber estimulado una actitud negativa de Bosch
hacia Duvalier que pocos meses después desencadenaría en el gran
incidente de abril de 1963 entre el gobierno dominicano y la
dictadura duvalierista “que por poco hubo una declaración de
guerra”.
En
agosto del mismo año, todavía siendo Bosch presidente, se produjo
otro reporte de la CIA sobre los planes del gánster cubano Rolando
Masferrer, que ya para entonces estaba en el exilio, que pretendía
derrocar tanto a Duvalier como a Juan Bosch, controlar totalmente la
isla de Santo Domingo y utilizar el territorio para lanzar un ataque
contra Cuba.
“Esa
información era pública, pero no se le dio mucha credibilidad dado
el desprestigio de Masferrer”, explicó Vega quien considera la
propuesta como otra de las “ideas locas del exilio cubano”.
***************************************************************************************
ANTONIO IMBERT BARRERAS NO ERA GOBERNADOR DE PUERTO PLATA EN LAS DÉCADAS DE 1950 Y 1960
Antonio
Imbert Barreras no era gobernador de Puerto Plata en 1960 cuando
mataron a las hermanas Mirabal como alegan y no pudo darle la orden a
Víctor A. Peña Rivera para que las mataran. Él había sido gobernador de
Puerto Plata en 1948-1949 y luego Trujillo lo destituyó porque desaprobó
su actuación frente a los expedicionarios de Luperón en 1949.
La
lista de gobernadores de esa provincia demuestra que el gobernador de
Puerto Plata entre 1954 y 1962 era Luis A. Ginebra y que el gobernador
interino era José Sixto Ginebra Henríquez 1956-1961.
Ver en Acento.com: Galería de gobernadores provinciales de Puerto Plata (1861-2014)
https://acento.com.do/opinion/galeria-gobernadores-provinciales-puerto-plata-1861-2014-8469932.html
Además de la lista, como pruebas de que Luis Ginebra era el gobernador en 1960, tenemos las siguientes referencias:
En su cronología Drama de Trujillo,
el periodista puertoplateño Alonso Rodríguez Demorizi comenta en la
pág. 81 sobre los preparativos para el Desfile del Millón que estaba
programado para el 24 de octubre, 1960:
“Se
dice que le han exigido al gobernador Luis Ginebra un contingente de
15,000 de Puerto Plata, pero no le dan dinero, ni transporte. En
Trujillolandia no hay vehículos. Para movilizar 1,000,000 se necesitan
200,000 carros de 5 pasajeros o 20,000 camiones.”
Más adelante, en la pág. 86, comenta sobre una reunión en Puerto Plata en 1960:
“Johnny
Abbes estuvo en el Hotel Tropical Bambú de Luis A. Pelegrín y allí
estuvieron con él Ernest Carlsson, Juan Bra Gómez hijo y Ramoncito
Mercado. Se dice que le entregaron algunos papeles pero como no ha
sucedido nada, nada se puede decir. Hasta el gobernador Luis Ginebra se
puso nervioso cuando supo que ese turpén andaba aquí.”
Luego, en la pág. 104, en octubre de 1960 el puertoplateño Rodríguez Demorizi comenta:
“Luis Ginebra, gobernador, conversó con Danilo Brugal Alfau, Iván Savignon More y conmigo frente a mi casa.”
Ver: https://en.calameo.com/books/00034521430d090c7a56c
*****
En su libro Balaguer y Yo (Tomo I), Víctor Gómez Bergés (pág. 134) menciona a L. Ginebra, gobernador de Puerto Plata, en abril de 1961:
“En
Puerto Plata, en el mes de abril del mismo año [1961], se había
realizado actos desaprensivos, algo parecidos, como salir a las 5 de la
madrugada de un baile… rodeado de un grupo de amigos que le acompañaban, entre ellos, Virgilio Alvarez Pina, Paíno Pichardo, el gobernador Luis Ginebra, Luis Augusto Ginebra Hernández...”
Ver: https://en.calameo.com/books/000345214b863f6f461aa
*****
En su libro La Era en los días del fin (pág.
115), el investigador Rafael Chaljub Mejía comenta sobre la visita de
Trujillo a Puerto Plata en 1959, parte de su gira para celebrar su
victoria sobre la expedición de 1959:
“Era martes, se quedó en la ciudad y al día siguiente asistió a una recepción en el histórico Club del Comercio, donde el señor gobernador don Luis Ginebra y su esposa doña Enriqueta, encabezaron la lista de los anfitriones.”
Ver: Google Books, el link es demasiado largo
*****
Nota final:
Estas
son pruebas que presentamos, no palabras vacías, pero sabemos que a los
manipuladores trujillistas estas pruebas no los inmutan y continuarán
repitiendo sus mentiras y difamaciones con tal de higienizar la imagen
de Trujillo y redimirlo de uno de los crímenes más repudiables de la Era
de Terror.
Es
una vieja táctica fascista atacar sistemáticamente, negar rotundamente,
empantanar, burlarse, crear confusión sobre los peores actos de
violencia de un régimen para, por lo menos, neutralizar con esa coraza
de mentiras, burlas y confusión, el impacto que tengan esos hechos
oprobiosos del pasado sobre la conciencia de las nuevas generaciones.
